El SPG-9 es un cañón sin retroceso ruso de 73 mm, portátil, transportable por sus servidores y que se monta sobre un trípode para su disparo. A pesar de ser liviano, el SPG-9 es transportado en un vehículo y llevado a la posición de sus dos servidores. Su despliegue se efectúa en un minuto. El arma está en servicio en un gran número de fuerzas armadas, y puede disparar una gran variedad de proyectiles.
(Figura de referencia NO incluida)